Por primera vez, en España una asociación de jueces alza la voz y demanda al Ministerio de Justicia y al Consejo General del Poder Judicial (CGPJ).
Jueces por la Democracia han denunciado la sobrecarga de trabajo que sufren, y también la falta de medios que tienen para poder desarrollar su trabajo.
En un momento en el que prácticamente cada día se conoce un nuevo caso de corrupción, los magistrados españoles están desbordados y a esta situación no se le pone una solución.
Además la sensación de impunidad que crea en la sociedad hace que los ciudadanos se sientan cada día más indignados con la clase política.
Se calcula que la mayoría de jueces españoles están trabajando a más del 150 por ciento de su capacidad de trabajo. Esto sin duda llega a afectar a su salud.
Hace poco más de un año, un juez murió en su trabajo cuando estaba al 203 por ciento de su capacidad. El día de su muerte tenía 19 juicios por celebrar, algo que superaba con creces su capacidad.
