David Cameron ha anunciado que cumplirá su promesa de celebrar un referéndum sobre la permanencia del Reino Unido en la Unión Europea.
Aunque este proyecto ha abierto una brecha en el seno del Partido Conservador británico, los sectores más eurófobos lo celebran.
“Tras este resultado, Cameron se va a sentir obligado a celebrar el referéndum. Buscará negociar una relación más favorable para el Reino Unido y luego recomendará a los británicos que voten por la permanencia en la Unión”, adelanta el exministro de Exteriores británico, Malcolm Rifkind.
En el horizonte de la nueva legislatura temas delicados como la relación de Londres con Bruselas y la posibilidad de implantar cuotas a los inmigrantes europeos.
“Quiero que nos devuelvan nuestra democracia, que si hay algo importante para los británicos la decisión final recaiga en sus representantes electos en el Parlamento británico. No puede ser que los temas importantes sean sometidos a leyes europeas que no podemos cambiar”,