Utilizar protección solar se considera una de las mejores medidas que podemos tomar por el bien de nuestra salud. Más del 80% de los casos de melanoma, el tipo más grave de cáncer de piel, se deben a quemaduras solares. Y su incidencia crece año tras año. Se calcula que cada año se diagnostican 1,5 millones de nuevos casos de cáncer de piel y se espera que esta cifra aumente un 50% de aquí a 2040. Se debe elegir un protector solar adecuado y optar por un producto con un FPS que se adapte a tu tipo de piel y a las condiciones en las que te expones al sol. Aplica el protector solar correctamente, extendiendo una cantidad generosa de manera uniforme sobre la piel seca entre 15 y 30 minutos antes de la exposición al sol. Vuelve a aplicarla regularmente cada dos horas, o después de nadar, sudar en exceso o secarse con la toalla. Utiliza la protección solar incluso en días nublados: la radiación ultravioleta puede atravesar las nubes, así que protégete a diario. Compleméntalo con otras medidas: lleva ropa protectora, gafas de sol y evita la exposición directa al sol en horas puntas.