En un preocupante episodio de inseguridad, la fiscal Gabriela Millán fue víctima de una violenta entradera en su hogar en Castelar, partido de Morón. Cuatro delincuentes armados ingresaron a su vivienda durante la cena del sábado, utilizando un ariete para forzar la puerta. El incidente plantea interrogantes sobre la seguridad de los funcionarios judiciales y si el ataque podría estar relacionado con su labor profesional. Las autoridades investigan el caso sin descartar ninguna hipótesis.