Han pasado diez años desde estas imágenes. El caso del asesinato del seguidor del Depor, Jimmy,
que fue arrojado junto a otro individuo al Manzanares sigue sin condenar a los responsables.
El trágico suceso sí aceleró medidas en contra de los grupos ultras en el mundo del fútbol. No obstante, estos movimientos están viviendo un repunte en España y en Europa con perfiles de individuos más "profesionalizados". La familia de Jimmy, con un perfil "bajo" en los medios, sigue esperando que se haga justicia.