Argentina enfrenta un desafío financiero crucial al gestionar sus compromisos de deuda. A pesar de tener un superávit fiscal, el país necesita un préstamo del Fondo Monetario Internacional (FMI) para cumplir con los vencimientos futuros y reforzar sus reservas. Este préstamo es vital para aliviar las restricciones cambiarias y fomentar la inversión extranjera. La situación actual refleja una historia de endeudamiento recurrente, siendo este el décimo noveno préstamo solicitado por Argentina. La atención está puesta en cuándo el FMI anunciará el desembolso, ya que esto podría influir en la estabilidad económica y cambiar la dinámica del mercado cambiario.