Poner voz al pensamiento. Es lo que acaba de lograr la Inteligencia Artificial. Un hito médico que parece ciencia ficción pero que ha cambiado la vida de Ane. Hace 18 años un ictus la dejó sin habla. Ahora una prótesis reproduce en sonidos las señales de su cerebro. La IA convierte esos sonidos en la voz que perdió hace casi dos décadas. Con 30 años un golpe llevó a Ann a sufrir parálisis severa. Su esfuerzo la llevó a recuperar la capacidad de llorar o reír, pero los músculos que permiten hablar aún permanecen dormidos. Su vida está a punto de cambiar. Esa sonrisa es la respuesta a demasiados años de silencio. Todo gracias a la Inteligencia Artificial. Registrando la actividad eléctrica y transformándolo en una comunicación fluida. Dejando atrás este lento dispositivo de comunicación asistida. Devolviendo recuerdos olvidados, Anne podrá hablar con su verdadera voz. La misma que el día de su boda.Hace 18 años Anne sobrevivió al accidente, ahora, dice, vuelve a vivir.
-Redacción-