Todo comenzó cuando efectivos de la División Búsqueda de Personas —en el marco de un sumario con intervención de la Fiscalía N°16— se presentaron en el domicilio señalado para realizar diligencias por un paradero.
En el lugar, fueron recibidos por una mujer que reaccionó de forma violenta, insultando y amenazando de muerte al personal. La situación escaló cuando se hizo presente su padre, un hombre de 60 años, de nacionalidad paraguaya, que forcejeó con los agentes. También se sumó BRUNO (26), quien fue reducido por tornarse hostil.
Lo más grave ocurrió cuando, desde el interior de la vivienda, la mujer comenzó a efectuar varios disparos con armas de fuego, entre ellas una pistola y una escopeta. La policía montó un perímetro de seguridad y convocó a Grupos Especiales y negociadores.
La mujer continúa atrincherada. Según su familia, se encuentra sola y sería adicta a estupefacientes.