El secretario general de la OTAN, Mark Rutte, ha realizado una visita de dos días a Japón, lo que ha generado una enérgica reacción por parte de China. Medios estatales como el Global Times han calificado la visita como parte de una "acelerada infiltración de la OTAN en la región Asia-Pacífico", una retórica habitual del gobierno chino ante la presencia de actores occidentales en su entorno geopolítico. Sin embargo, el acercamiento ha sido promovido por el propio gobierno japonés.