👉 María Cecilia Escarpa vivió una pesadilla tras cenar en un restaurante de Devoto, Buenos Aires. Al regresar a su auto, descubrió que las llaves de su casa habían sido robadas. Los delincuentes aprovecharon la tecnología de inhibidores para acceder al vehículo sin forzar cerraduras y obtener las llaves y documentos personales. Posteriormente, saquearon su hogar en Caseros mientras ella cenaba tranquilamente. Este tipo de robos se está volviendo común, ya que los ladrones utilizan dispositivos para bloquear señales de cierre centralizado y actuar con total impunidad.
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