Parte 1 - ADOPCIÓN PARTE 2 (60-0518) - William Branham | LOS HIJOS DE DIOS MANIFESTADOS
Adopcion Parte 2 William Branham – Este video presenta un poderoso mensaje titulado “Hijos de Dios Manifestados (Adopción #2)” predicado por el Hermano Branham el 18 de mayo de 1960 en Jeffersonville, Indiana. En esta segunda parte de la serie de adopción, se exploran profundas verdades sobre la adopción espiritual y la manifestación de los hijos de Dios, ofreciendo revelación y aliento para los creyentes en el plan de Dios. A continuación, algunos puntos destacados que invitan a ver el video completo:
Nuevo nacimiento vs. adopción: El Hermano Branham aclara la diferencia entre el nuevo nacimiento y la adopción espiritual. Nacer de nuevo nos hace hijos de Dios por la obra del Espíritu Santo, pero la adopción –en el sentido espiritual– es nuestra colocación como hijos maduros en posición
. La adopción de un creyente no es su nacimiento, sino su colocación como hijo heredero en el Reino. Fuimos predestinados por Dios para esta adopción especial, destinada a manifestarse en estos últimos días
.
El Espíritu Santo como nuestro “Josué”: Así como Josué guio a Israel a poseer la Tierra Prometida y distribuyó la herencia a cada tribu, el Espíritu Santo es el “Josué” del Nuevo Testamento que hoy coloca a la Iglesia en su correcta posición
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. El Hermano Branham enseña que Cristo, como Moisés, nos sacó de Egipto (el pecado) y nos llevó hasta la frontera de la promesa; pero es el Espíritu Santo quien nos introduce y nos ubica en la tierra espiritual de promesas. El Josué de hoy pone a cada creyente en orden, dándole sus dones, lugar y posición dentro del Cuerpo de Cristo
. ¡Es glorioso encontrar nuestra posición en Cristo y reclamar nuestra herencia espiritual prometida! Como Israel recibió una tierra por heredad, la Iglesia tiene una herencia espiritual predestinada en Cristo.
Herencia espiritual y colocación del creyente: Dios ya nos concedió una rica herencia en lugares celestiales (Efesios 1). Cada hijo e hija nacida de nuevo tiene derechos de herencia, pero debe ser colocado en su posición por adopción para poseer plenamente esas promesas. El Espíritu Santo está colocando a cada miembro en orden, ubicando a la Iglesia en posición conforme al plan divino
. Esta “colocación” (adopción) es un acto soberano de Dios – una revelación divina y no un aprendizaje humano– para establecer al creyente en su puesto correcto. Cuando Dios coloca al creyente, le otorga autoridad y responsabilidad como hijo maduro, listo para reclamar las promesas de predestinación y vivir la victoria de su Tierra Prometida espiritual. Tenemos así la seguridad de una herencia incorruptible y el entendimiento de cuál es nuestro lugar en el Cuerpo de Cristo.
Manifestación de los hijos de Dios en los últimos días: El mensaje enfatiza que estamos viviendo el tiempo de la manifestación de los hijos de Dios prometada en la Biblia (Romanos 8:19).