Insultos y racismo en la TVE sanchista.
El problema es que no es la primera vez que sucede y además, para más inri, vuelve a pasar en el programa de Javier Ruiz.
Si hace algunas fechas el presentador de 'Mañaneros 360' se quejó de la presencia de nuestro compañero Bertrand Ndongo (Periodista Digital) en el Congreso de los Diputados llamándole "especie invasora", ahora fue la gritona y desquiciada de Sarah Santaolalla la que en el mismo espacio utilizó el apelativo "gorila con micro" para arremeter contra el reportero:
Te voy a poner un ejemplo, y un ejemplo personal. Si esta gente quisiera hacer periodismo, a mí el gorila que me persigue con un micro, me preguntaría sobre la gestión de un gobierno o de otro, y no me diría que si me saco o no me saco las tetas. Esto es lo que estamos hablando, y hay que decirlo, y hay que decirlo, y aprovecho en la televisión pública para decir lo que está pasando en el Congreso, pero fuera, porque muchos de estos se sientan en tertulias, y nos hacen creer que tenemos que normalizar que esa gente esté en una tertulia de televisión, cuando no tiene ni categoría, cuando no tiene ni valor, y cuando no tiene información.
Santaolalla exigió la expulsión de periodistas como Ndongo de la Cámara Baja, institución a la que criticó la tardanza en sacar un reglamento para instaurar de nuevo la censura:
Eso me lo han dicho a mí, y esto me lo dicen gente que tiene una acreditación en el Congreso, y que quizás el Congreso de los Diputados llega tarde para expulsar a estos energúmenos. Esto es muy grave, y normalizar que mañana esta gente pueda estar sentada con compañeros como Aroca, o con compañeros como otros muchos, es muy peligroso.
De paso, trató de vender un escenario apocalíptico en el que acusó a los reporteros que no le son afines de poco menos de estar a un paso de ejercer la violencia física:
Claro, porque no es lo normal, no podemos normalizar la violencia, porque nos vamos a arrepentir todos. Porque pasa una cosa, ya no preguntan, ya no acosan, ya no solo insultan, ya no persiguen. Es que el día que pasen a las manos, ¿qué vamos a hacer? ¿Qué vamos a hacer? Vamos a decir, ¡ay, es verdad, los que avisaban no eran tan agoreros, decían la verdad! Es que esta gente está amenazando, esta gente va a los colegios a por hijos de periodistas, y hay que decirlo, esta gente es muy peligrosa, y no debe tener ni una acreditación en el Congreso, ni una silla en ninguna tertulia.