A Petrona de Griffit le pareció una muy buena idea usar las frutas de estación para convertirlas en vino, y así evitar que se desperdicie la producción agrícola familiar. Hace ocho años se inspiró y empezó a buscar recetas y hoy es una gran emprendedora en este rubro de vinos frutales artesanales en Tañarandy, ubicado en el distrito de San Ignacio, Departamento de Misiones.